Secretos, secretotes, secretitos

miércoles, 23 de noviembre de 2005


Soy muy buena guardando secretos. He guardado tantos, que con el pasar del tiempo ya he olvidado algunos, pero tengan la certeza de que en mi olvido estarán seguros hasta mi muerte.
Pero, ¿Quien alguna vez no ha contado un secreto?
Pues bien, reconozco que alguna vez se me ha “salido” alguno.
Pero ¿los secretos se pueden contar dependiendo del calibre de éste? ¿Estamos capacitados para saber qué secretos contar y qué secretos no?

De partida por el sólo hecho de ser secreto no debe ser contado.Y ahí está la primera contradicción que se produce en nuestra infancia... ¿qué pasa cuando tu hijo o hija llega del jardín o del colegio y te dice que con el profe o la profe o la tía tienen un secreto que no se lo puede contar a nadie?
Si somos desconfiados (que hay que serlo en todo momento en estos días) lo primero que le decimos a nuestros hijos es que no existen los secretos con la mamá y que a la mamá se le debe contar todo. A mi me dijeron lo mismo.
Y ahí empieza el dilema y empezamos a clasificar los secretos... cuáles contar y cuáles no.
Quien no ha escuchado alguna vez “oye, me contaron un secreto que te lo voy a contar, pero no se lo cuentes a nadie”, ya con eso tienes todo el permiso para contarlo a otra persona, (puesto que es un secreto que ya no lo es) y esa persona a otra y así el secreto pasa de ser secreto a rumor y luego a noticia que hasta puede salir en el diario.
¿Quién alguna vez no ha conocido a alguien que caga la fiesta sorpresa del amigo por que no se pudo aguantar y le contó igual?
¿Quién no ha sabido alguna vez que a un pariente se le cayó el casette le contó al sobrino quien era su verdadero padre y provocó el tremendo drama familiar?
¿Quién no ha sabido alguna vez de un tío que se fue de viaje al África , que nunca escribe y que resulta que estaba en cana por estafa?
¿Quién no ha escuchado alguna vez el término “era un secreto a voces”?
¿Quién realmente mató a Marilyn Monroe?
¿Le contarían un secreto a Joey de “Friends” o a Pamela Díaz?

Hay personas que no pueden guardar secretos, ni los insignificantes ni los gravísimos. Y hay personas que se han llevado grandes secretos ha la tumba y que hasta el día de hoy son un misterio que ni la ciencia ha podido descubrir.

Más que un susurro en el oído los secretos son un signo de confianza que a pesar de todo uno debe respetar, así que shhhhhhhhhhh si tienen un secreto, me los pueden contar, yo sé guardarlos muy bien, y no se los cuento a nadie...
 
escrito por Yunicua a las 6:10 p. m., |

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